El ropero necesita pantalones vaqueros, de pana, jerseys y sudaderas Quieren tener suficientes prendas antes de que llegue el frío extremo
S. V. GRANADA 
Aunque el tiempo está siendo benigno y el frío intenso del invierno de Granada, con temperaturas bajo cero, no ha llegado todavía, los voluntarios del ropero de San Rafael están preparando ya los fondos para ofrecer a los usuarios del comedor social o a las personas que acuden al centro en busca de ayuda. Y necesitan donaciones para poder atender la demanda que tienen, que se acrecienta con el invierno.
Así, necesitan mantas y ropa de abrigo que luego ofrecen cada día en el ropero a los usuarios del comedor, que tienen que pasar antes por las duchas del centro y pueden cambiar su ropa. Según la responsable de los voluntarios, hace una semana, cuando hubo una bajada de temperaturas, se necesitaron más mantas ya que "nos pedían muchas y no teníamos para darles". Y las siguen necesitando ya que es de imaginar la dureza de vivir en la calle, dormir en un cajero o un banco cuando por la noche los termómetros bajan cerca de los cero grados, llueve, nieva y no se dispone de un hogar donde cobijarse o de una estufa con la que calentarse. "La semana pasada pedimos mantas y la gente ha respondido, pero necesitamos más", dijo Inés.
Y tienen más necesidad de cara al invierno que está por llegar, por lo que hacen un llamamiento para conseguir esos fondos antes de que llegue el aumento de la demanda y no se pueda responder bien.
Lo que necesitan son pantalones y ropa de abrigo, principalmente de hombre y de tallas estándar, una M o L como mucho. Es lo más demandado y tienen déficit ya que muchas veces se donan cosas grandes o ropa de arreglar, que no son las necesidades que tienen las personas que acuden a este servicio.
Así, necesitan pantalones vaqueros, de pana o de tejido grueso, de las tallas 40 a la 44, prendas con las que soportar el frío del invierno. Además, requieren de sudaderas y jerseys gordos, así como chaquetones, también de talla estándar, la M. Camisetas interiores o calcetines de deporte también hacen falta, según los voluntarios.
En cuanto al calzado, aunque hay más reservas, si se quiere aportar algo que sean zapatillas de deporte o zapatos gordos, tipo bota, aunque la petición se centra en los pantalones y sudaderas, de lo que hay menos.
Para colaborar con la Orden de San Juan de Dios y su ropero se puede entregar la ropa a cualquier hora todos los días ya que han dispuesto un contenedor para la recogida que revisan a diario. Las prendas donadas son clasificadas en el ropero.
El objetivo de los voluntarios es alcanzar los fondos suficientes antes de que el tiempo empeore más y la necesidad sea urgente, por lo que hacen un llamamiento a la ciudadanía para que done lo que puedan de ropa. Un gesto solidario que puede suponer el bienestar y el abrigo de otras personas que tienen que sumar a sus dificultades diarias y a sus condiciones de vida la dureza del frío en invierno que les obliga a buscar abrigo.
Así, necesitan mantas y ropa de abrigo que luego ofrecen cada día en el ropero a los usuarios del comedor, que tienen que pasar antes por las duchas del centro y pueden cambiar su ropa. Según la responsable de los voluntarios, hace una semana, cuando hubo una bajada de temperaturas, se necesitaron más mantas ya que "nos pedían muchas y no teníamos para darles". Y las siguen necesitando ya que es de imaginar la dureza de vivir en la calle, dormir en un cajero o un banco cuando por la noche los termómetros bajan cerca de los cero grados, llueve, nieva y no se dispone de un hogar donde cobijarse o de una estufa con la que calentarse. "La semana pasada pedimos mantas y la gente ha respondido, pero necesitamos más", dijo Inés.
Y tienen más necesidad de cara al invierno que está por llegar, por lo que hacen un llamamiento para conseguir esos fondos antes de que llegue el aumento de la demanda y no se pueda responder bien.
Lo que necesitan son pantalones y ropa de abrigo, principalmente de hombre y de tallas estándar, una M o L como mucho. Es lo más demandado y tienen déficit ya que muchas veces se donan cosas grandes o ropa de arreglar, que no son las necesidades que tienen las personas que acuden a este servicio.
Así, necesitan pantalones vaqueros, de pana o de tejido grueso, de las tallas 40 a la 44, prendas con las que soportar el frío del invierno. Además, requieren de sudaderas y jerseys gordos, así como chaquetones, también de talla estándar, la M. Camisetas interiores o calcetines de deporte también hacen falta, según los voluntarios.
En cuanto al calzado, aunque hay más reservas, si se quiere aportar algo que sean zapatillas de deporte o zapatos gordos, tipo bota, aunque la petición se centra en los pantalones y sudaderas, de lo que hay menos.
Para colaborar con la Orden de San Juan de Dios y su ropero se puede entregar la ropa a cualquier hora todos los días ya que han dispuesto un contenedor para la recogida que revisan a diario. Las prendas donadas son clasificadas en el ropero.
El objetivo de los voluntarios es alcanzar los fondos suficientes antes de que el tiempo empeore más y la necesidad sea urgente, por lo que hacen un llamamiento a la ciudadanía para que done lo que puedan de ropa. Un gesto solidario que puede suponer el bienestar y el abrigo de otras personas que tienen que sumar a sus dificultades diarias y a sus condiciones de vida la dureza del frío en invierno que les obliga a buscar abrigo.
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