El segundo tiempo de las cruces, más familiar y muy tranquilo granadahoy.com

La ciudad se volvió a llenar para disfrutar de esta fiesta La lluvia sorprendió de nuevo al mediodía

S. V. GRANADA 

El segundo día se aprovechó más para visitar los monumentos.
Granada vivió ayer su segundo día de cruces, el segundo tiempo de una fiesta típica que atrae a numerosos turistas y que hace que los granadinos salgan a la calle para ver los altares montados y valorar el esfuerzo por mantener la tradición. Y si el viernes, el propio día 3 de mayo, la jornada fue más festiva, juvenil y turística, la de ayer fue una segunda ronda mucho más familiar y tranquila. 

Aunque algunas cruces se habían quitado ya, la mayoría estaban todavía montadas para aprovechar el estirón que ha sufrido la fiesta este año con un día más de licencia. Y como el tiempo respetó durante la mañana, la gente se decidió a salir para visitar, a modo de ruta con el plano de cruces en la mano, todas las que no pudo ver el día anterior y hacer así el pleno en el recorrido de cruces 2013. 

El Centro estaba lleno, al igual que los establecimientos hosteleros, que tienen en el día de la Cruz uno de los marcados en el calendario como de lleno seguro. 

Además del Centro, el Albaicín fue sin duda otro de los centros de la celebración. Además, como la mañana acompañó, las empinadas y empedradas calles albaicineras estuvieron repletas de gente. No en vano, el barrio tiene tradición de montar cruces de gran nivel y tradicionalmente premiadas, como la de Plaza Larga, que ya es una histórica y siempre está en el palmarés de las premiadas, este año como primer premio en la categoría de calles y plazas. 

Pero al igual que el viernes, la meteorología sorprendió y a mediodía cayó de nuevo un chaparrón que deslució por un momento la visita de las cruces. Aunque los negocios lo aprovecharon para llenarse un poco más y aumentar la caja. 

Pero tras los momentos de lluvia de nuevo se pudieron ver en las calles los vestidos de gitana, los niños con los globos y los trajes cortos. 

La fiesta duró otra jornada más hasta pasada la medianoche ya que la licencia de la cruz expiraba a las dos de la madrugada. Hora a la que ya estaban todos los enseres recogidos y los mantones guardados para esperar al montaje del año que viene para unas nuevas cruces.