Cuatro familias de Salobreña estrenarán en un mes su nueva vivienda reconstruida a través del programa de Infravivienda de la Junta de Andalucía. Un sueño que no podrían haber costeado.
LOURDES MINGORANCE
VIVÍAN en unas condiciones prácticamente infrahumanas. Sin embargo, dentro de un mes estrenarán su hogar de nueva construcción tras una intervención conjunta entre la Junta de Andalucía apoyada por el Ayuntamiento de Salobreña. Son los Maldonado, una enorme familia que reside en varias casas situadas en la calle Fábrica que tras acogerse al Plan de Infravivienda de la Junta de Andalucía disfrutarán en menos de un mes de un espacio plenamente habitable.
Belén Maldonado es una de las mujeres que se acogió a este plan allá por el 2001. Su cara de felicidad y entusiasmo al enseñar su casa, todavía en obras, denota la enorme ilusión que le produce estrenarla y contar con comodidades o infraestructuras tan básicas como el baño que antes no tenía. Llevo toda mi vida viviendo aquí. Era la casa de mis abuelos y vivimos yo y mi hijo", explica emocionada al ver cómo las paredes están a falta de una mano de pintura. "Echaba de menos tener un cuarto de baño o un comedor" remarca, aunque asegura que nunca se habría ido, pues aquí es donde nació.
Aunque todavía no la ha estrenado -la vivienda está en su última fase de construcción que fue iniciada el pasado mes de octubre- Maldonado relata que cuando le entreguen la llave lo primero que hará será una celebración junto a su familia, pues tanto ella como el resto de los vecinos que residen en esta calle guardan algún tipo de parentesco o "como si lo tuvieran" afirma, pues se conocen desde siempre.
De hecho, a pocos metros, también reside Antonio Maldonado Fernández, junto a su mujer y sus dos hijos. Otra unidad familiar acogida a este Plan de Infravivienda que también muy pronto estrenará su nueva casa que ha sumado una planta con dos habitaciones. Según explica Fernández, llevaba años demandando la ayuda. Sin embargo, los diferentes planes de vivienda se vieron afectados por la crisis económica hasta que finalmente en el último año han cogido de nuevo impulso.
Por aquel entonces, cuando la solicitaron consideraban la intervención necesaria, sin embargo, ahora ya era imprescindible, pues tienen dos hijos pequeños ya que apenas sumaban 50 metros para cuatro personas. "Vamos a pasar de vivir en una chabola a tener una vivienda digna" detalla muy contento Fernández mientras mira la nueva fachada de su casa que luce un blanco impecable. Además, la vivienda no solo se ha construido de cero, si no que se le ha añadido una planta nueva con dos habitaciones de gran tamaño que se suman al salón y el baño de la planta inferior. Por su parte, el padre de Antonio, que vive en otra zona de Salobreña conocida como El Molino también contempla la casa y no duda en afirmar que lo que han hecho es "una auténtica maravilla". Ahora todos esperan con mucha ilusión el día en que les entreguen la llave de su casa, la que les abrirá las puertas a su nueva vida. Mientras llega ese momento, estas familias de carácter humilde están viviendo en pisos de alquiler de bajo coste. Por ejemplo, Fernández detalla que su familia, "va tirando como puede", pues él no encuentra trabajo. Eso sí, han tenido suerte: Su mujer ha conseguido un empleo en el mercado que les permite afrontar los gastos más básicos. Así, todas estas familias afirman que estas obras habrían sido imposibles de costear con dinero de su bolsillo pues la falta de trabajo les lleva a situaciones límite.
Mientras cuentan su historia, saludan al alcalde del municipio, Gonzalo Fernández Pulido, de sobra conocido por estos vecinos que lo reciben de forma amistosa. Para Pulido, los programas de Infravivienda de la Junta de Andalucía suponen una auténtica oportunidad tanto para las familias como para la propia localidad, capaz de fijar una población que tiende a emigrar como consecuencia del desempleo. En esta última faceta también juega un papel fundamental este programa, ya que entre los operarios que han construido estas viviendas hay alrededor de siete vecinos de Salobreña que han encontrado trabajo.
En concreto, las obras comenzaron en octubre de 2013 y está previsto que finalicen en aproximadamente un mes, aunque ya están a falta de pocos detalles. En esta línea Pulido remarca la enorme transformación social que suponen los cambios en estas viviendas que presentaban graves deficiencias. Con anterioridad, el municipio ha acogido otros proyectos de este plan en otras zonas, con intervenciones que afectaban a 21 familias en Salobreña y anejos. Además, con la finalización de las obras de la calle Fábrica Nueva, se llevará a cabo una nueva actuación en cuatro infraviviendas pendientes.
Por otra parte y según explica el Jefe del Servicio de Vivienda de la Junta de Andalucía, Nahum Álvarez, el programa de infravivienda ha rescatado en el último año numerosos convenios firmados en 2001, como son las viviendas de Salobreña. Una vez que se finalice con estas actuaciones se activará un nuevo plan de infravivienda que contará con la ayuda de una nueva herramienta: el Observatorio de la Vivienda de la Junta de Andalucía que pretende detallar todas las necesidades en esta materia en todo el territorio andaluz. "De esta forma tendremos datos totalmente actualizados", remarca Álvarez que explica que Granada es una de las provincias con más índice de infravivienda de Andalucía. Entre las actuaciones más destacadas en materia de vivienda se encuentran las obras en cientos de cuevas, que en muchas ocasiones no disponen de baño, ni duchas, sumado al resto de reparaciones más habituales como los techos, los revestimientos o las cubiertas.
Dentro del Plan de Rehabilitación autonómica, que se activó con el plan de Choque de la Junta de Andalucía se han entregado un total de 157 viviendas con una subvención de 1.629.000 euros, en municipios como Castril, Baza, Iznalloz, Íllora o Moraleda. En 2013 se contabilizaron otras 274 obras que se encuentran en fase de desarrollo en 36 municipios con una inversión de 2.220.634,75 euros estando prevista su desarrollo y finalización para este año. Por otra parte, dentro del plan de Infravivienda, iniciado en 2013, se actúa en 33 municipios como Beas de Granada, Pedro Martínez, Zújar, o Lanjarón con una inversión de 1.867.546 euros.
Por su parte, el delegado de Fomento de la Junta de Andalucía, Manuel Morales, explica que pronto se abrirán nuevas convocatorias dentro del novedoso plan anunciado por la Consejería de Vivienda en las últimas semanas y que se aprobará en junio. Según el organismo autonómico, de aquí a 2020, la Junta de Andalucía va a intervenir en un total de 94.700 viviendas, 59.000 de ellas en el programa de actuaciones en edificios, 31.500 en el de inmuebles unifamiliares y 4.200 en el de infraviviendas en todo el territorio andaluz. Todo, con una inversión pública superior a los mil millones de euros, de los que 775 millones son fondos europeos del marco 2014-2020, sumados a programas autonómicos y fondos del plan de vivienda. De esta forma, se atiende a la doble variante, por un lado ante la necesidad social en materia de vivienda pero también para activar el sector de la construcción, tan castigado por la crisis. Para Morales son, todas ellas, buenas noticias, que se presentan "como una apuesta de parte de la Consejería por un cumplimiento real de la función social de la vivienda".
Belén Maldonado es una de las mujeres que se acogió a este plan allá por el 2001. Su cara de felicidad y entusiasmo al enseñar su casa, todavía en obras, denota la enorme ilusión que le produce estrenarla y contar con comodidades o infraestructuras tan básicas como el baño que antes no tenía. Llevo toda mi vida viviendo aquí. Era la casa de mis abuelos y vivimos yo y mi hijo", explica emocionada al ver cómo las paredes están a falta de una mano de pintura. "Echaba de menos tener un cuarto de baño o un comedor" remarca, aunque asegura que nunca se habría ido, pues aquí es donde nació.
Aunque todavía no la ha estrenado -la vivienda está en su última fase de construcción que fue iniciada el pasado mes de octubre- Maldonado relata que cuando le entreguen la llave lo primero que hará será una celebración junto a su familia, pues tanto ella como el resto de los vecinos que residen en esta calle guardan algún tipo de parentesco o "como si lo tuvieran" afirma, pues se conocen desde siempre.
De hecho, a pocos metros, también reside Antonio Maldonado Fernández, junto a su mujer y sus dos hijos. Otra unidad familiar acogida a este Plan de Infravivienda que también muy pronto estrenará su nueva casa que ha sumado una planta con dos habitaciones. Según explica Fernández, llevaba años demandando la ayuda. Sin embargo, los diferentes planes de vivienda se vieron afectados por la crisis económica hasta que finalmente en el último año han cogido de nuevo impulso.
Por aquel entonces, cuando la solicitaron consideraban la intervención necesaria, sin embargo, ahora ya era imprescindible, pues tienen dos hijos pequeños ya que apenas sumaban 50 metros para cuatro personas. "Vamos a pasar de vivir en una chabola a tener una vivienda digna" detalla muy contento Fernández mientras mira la nueva fachada de su casa que luce un blanco impecable. Además, la vivienda no solo se ha construido de cero, si no que se le ha añadido una planta nueva con dos habitaciones de gran tamaño que se suman al salón y el baño de la planta inferior. Por su parte, el padre de Antonio, que vive en otra zona de Salobreña conocida como El Molino también contempla la casa y no duda en afirmar que lo que han hecho es "una auténtica maravilla". Ahora todos esperan con mucha ilusión el día en que les entreguen la llave de su casa, la que les abrirá las puertas a su nueva vida. Mientras llega ese momento, estas familias de carácter humilde están viviendo en pisos de alquiler de bajo coste. Por ejemplo, Fernández detalla que su familia, "va tirando como puede", pues él no encuentra trabajo. Eso sí, han tenido suerte: Su mujer ha conseguido un empleo en el mercado que les permite afrontar los gastos más básicos. Así, todas estas familias afirman que estas obras habrían sido imposibles de costear con dinero de su bolsillo pues la falta de trabajo les lleva a situaciones límite.
Mientras cuentan su historia, saludan al alcalde del municipio, Gonzalo Fernández Pulido, de sobra conocido por estos vecinos que lo reciben de forma amistosa. Para Pulido, los programas de Infravivienda de la Junta de Andalucía suponen una auténtica oportunidad tanto para las familias como para la propia localidad, capaz de fijar una población que tiende a emigrar como consecuencia del desempleo. En esta última faceta también juega un papel fundamental este programa, ya que entre los operarios que han construido estas viviendas hay alrededor de siete vecinos de Salobreña que han encontrado trabajo.
En concreto, las obras comenzaron en octubre de 2013 y está previsto que finalicen en aproximadamente un mes, aunque ya están a falta de pocos detalles. En esta línea Pulido remarca la enorme transformación social que suponen los cambios en estas viviendas que presentaban graves deficiencias. Con anterioridad, el municipio ha acogido otros proyectos de este plan en otras zonas, con intervenciones que afectaban a 21 familias en Salobreña y anejos. Además, con la finalización de las obras de la calle Fábrica Nueva, se llevará a cabo una nueva actuación en cuatro infraviviendas pendientes.
Por otra parte y según explica el Jefe del Servicio de Vivienda de la Junta de Andalucía, Nahum Álvarez, el programa de infravivienda ha rescatado en el último año numerosos convenios firmados en 2001, como son las viviendas de Salobreña. Una vez que se finalice con estas actuaciones se activará un nuevo plan de infravivienda que contará con la ayuda de una nueva herramienta: el Observatorio de la Vivienda de la Junta de Andalucía que pretende detallar todas las necesidades en esta materia en todo el territorio andaluz. "De esta forma tendremos datos totalmente actualizados", remarca Álvarez que explica que Granada es una de las provincias con más índice de infravivienda de Andalucía. Entre las actuaciones más destacadas en materia de vivienda se encuentran las obras en cientos de cuevas, que en muchas ocasiones no disponen de baño, ni duchas, sumado al resto de reparaciones más habituales como los techos, los revestimientos o las cubiertas.
Dentro del Plan de Rehabilitación autonómica, que se activó con el plan de Choque de la Junta de Andalucía se han entregado un total de 157 viviendas con una subvención de 1.629.000 euros, en municipios como Castril, Baza, Iznalloz, Íllora o Moraleda. En 2013 se contabilizaron otras 274 obras que se encuentran en fase de desarrollo en 36 municipios con una inversión de 2.220.634,75 euros estando prevista su desarrollo y finalización para este año. Por otra parte, dentro del plan de Infravivienda, iniciado en 2013, se actúa en 33 municipios como Beas de Granada, Pedro Martínez, Zújar, o Lanjarón con una inversión de 1.867.546 euros.
Por su parte, el delegado de Fomento de la Junta de Andalucía, Manuel Morales, explica que pronto se abrirán nuevas convocatorias dentro del novedoso plan anunciado por la Consejería de Vivienda en las últimas semanas y que se aprobará en junio. Según el organismo autonómico, de aquí a 2020, la Junta de Andalucía va a intervenir en un total de 94.700 viviendas, 59.000 de ellas en el programa de actuaciones en edificios, 31.500 en el de inmuebles unifamiliares y 4.200 en el de infraviviendas en todo el territorio andaluz. Todo, con una inversión pública superior a los mil millones de euros, de los que 775 millones son fondos europeos del marco 2014-2020, sumados a programas autonómicos y fondos del plan de vivienda. De esta forma, se atiende a la doble variante, por un lado ante la necesidad social en materia de vivienda pero también para activar el sector de la construcción, tan castigado por la crisis. Para Morales son, todas ellas, buenas noticias, que se presentan "como una apuesta de parte de la Consejería por un cumplimiento real de la función social de la vivienda".
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