Un equipo de investigadores analizará los datos de la Junta de Andalucía para realizar un estudio e implantar medidas de acción
LOURDES MINGORANCE GRANADA 
Granada se ha propuesto convertirse en una ciudad más amable y ha iniciado dos potentes investigaciones para conseguir este objetivo. Tras las elecciones municipales, la concejal de Medio Ambiente, Telesfora Ruiz ya anunció que el área que lidera retomaría el mapa de ruidos para establecer medidas que redujesen los decibelios en la capital. Una tarea que, dentro del proyecto Agenda Local 21 realiza el profesor titular de la UGR del departamento de Física Aplicada, Jerónimo Vida. Pues bien, mientras este profesor lleva a cabo su investigación la capital ha iniciado otro proyecto para analizar la calidad del aire, esta vez liderado por Lucas Alados, catedrático de la UGR que entre otros proyectos, ya ha analizado los efectos de la implantación de la Línea de Alta Capacidad (LAC).
Según ha explicado la concejal de Medio Ambiente aGranada Hoy, la idea ahora es analizar la calidad del aire en la capital de cara a establecer políticas de reducción de partículas contaminantes para convertir la ciudad en un sitio más amable para vivir. Para ello se ha firmado un acuerdo a través de la Fundación Empresa-Universidad de Granada para desarrollar estos trabajos. "El diseño de este plan estará fundamentado en los datos de la Junta de Andalucía que es la administración que analiza la calidad del aire. Con la base de un primer diagnóstico se realizará un plan de actuación con distintos objetivos que afectará a áreas como Movilidad", detalló Ruiz que recuerda que Granada es una ciudad muy complicada dada su orografía. Al quedar enclavada en una especie de "olla" es más fácil que se acumulen las partículas disparando los niveles de contaminación. Algo que sucede por ejemplo con la llegada de las bolsas de polvo subsahariano. "Hay cosas que no se podrán evitar pero sí que podemos reducir la contaminación, por ejemplo, con la compra de vehículos eléctricos, la reducción del tráfico o logrando que los ciudadanos se desplacen en otros medios de transporte más sostenibles como el autobús o la bicicleta", detalla Ruiz. Por este motivo, para la concejal es importante no solo establecer políticas de reducción de emisiones si no también concienciar a la ciudadanía. "Todos tenemos que contribuir", remarca la edil.
El catedrático de Física Aplicada de la UGR, Lucas Alados ha explicado que en el equipo trabajarán tres personas que van a analizar los datos de las distintas estaciones para realizar un diagnóstico de la situación en cuanto a calidad del aire, especialmente centrada en las partículas de NO2 o PM10. "Trabajaremos con los datos de la estación de Granada Norte, pero también Palacio de Congresos y Ciudad Deportiva de Armilla. Son las estaciones con las que la Junta de Andalucía monitoriza el aire de Granada".
La idea es investigar las superaciones e indagar en la información para ver los ciclos diarios, semanales intentando desvelar cuando se dan las superaciones. Estos datos se combinará con información meteorológica para identificar la capa de aire en la que se dispersan las citadas partículas. Con todo ello, se "establecerán medidas para intentar paliar los problemas de calidad del aire en Granada", destacó Alados.
Según ha explicado la concejal de Medio Ambiente aGranada Hoy, la idea ahora es analizar la calidad del aire en la capital de cara a establecer políticas de reducción de partículas contaminantes para convertir la ciudad en un sitio más amable para vivir. Para ello se ha firmado un acuerdo a través de la Fundación Empresa-Universidad de Granada para desarrollar estos trabajos. "El diseño de este plan estará fundamentado en los datos de la Junta de Andalucía que es la administración que analiza la calidad del aire. Con la base de un primer diagnóstico se realizará un plan de actuación con distintos objetivos que afectará a áreas como Movilidad", detalló Ruiz que recuerda que Granada es una ciudad muy complicada dada su orografía. Al quedar enclavada en una especie de "olla" es más fácil que se acumulen las partículas disparando los niveles de contaminación. Algo que sucede por ejemplo con la llegada de las bolsas de polvo subsahariano. "Hay cosas que no se podrán evitar pero sí que podemos reducir la contaminación, por ejemplo, con la compra de vehículos eléctricos, la reducción del tráfico o logrando que los ciudadanos se desplacen en otros medios de transporte más sostenibles como el autobús o la bicicleta", detalla Ruiz. Por este motivo, para la concejal es importante no solo establecer políticas de reducción de emisiones si no también concienciar a la ciudadanía. "Todos tenemos que contribuir", remarca la edil.
El catedrático de Física Aplicada de la UGR, Lucas Alados ha explicado que en el equipo trabajarán tres personas que van a analizar los datos de las distintas estaciones para realizar un diagnóstico de la situación en cuanto a calidad del aire, especialmente centrada en las partículas de NO2 o PM10. "Trabajaremos con los datos de la estación de Granada Norte, pero también Palacio de Congresos y Ciudad Deportiva de Armilla. Son las estaciones con las que la Junta de Andalucía monitoriza el aire de Granada".
La idea es investigar las superaciones e indagar en la información para ver los ciclos diarios, semanales intentando desvelar cuando se dan las superaciones. Estos datos se combinará con información meteorológica para identificar la capa de aire en la que se dispersan las citadas partículas. Con todo ello, se "establecerán medidas para intentar paliar los problemas de calidad del aire en Granada", destacó Alados.
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