Las plazas para discapacitados crecen un 370% en ocho años granadahoy.com

La capital tiene casi 650 zonas de aparcamientos reservadas para personas con movilidad reducida Las denuncias a infractores bajan progresivamente

VIRGINIA MARTÍNEZ GRANADA

Un conductor con movilidad reducida accede al interior de su coche estacionada en plaza reservada.
Encontrar aparcamiento suele resultar empresa difícil. Al tiempo que inviertes dando vueltas hasta hallar un sitio libre hay que sumar el recorrido a pie hasta el destino deseado. En el caso de personas con movilidad reducida la tarea se hace aún más tediosa. Para facilitar la búsqueda la ciudad cuenta con zonas reservadas para discapacitados. Con cerca de 650 estacionamientos, se ha experimentado un incremento de casi 370% desde 2005, cuando alcanzaban las 175. 

Una mayor sensibilidad y concienciación ha llevado al Consistorio a elevar el número de aparcamientos reservados. Telesfora Ruiz, concejal de Movilidad en el Ayuntamiento, subraya el interés por responder a las demandas de la forma más rápida posible para remover los obstáculos de accesibilidad. Pero, ¿cuál es el criterio seguido al situar los estacionamientos? En primer lugar, hay que diferenciar las zonas de las plazas. Las primeras hacen referencia a las áreas donde se van ubicar los aparcamientos, mientras que las segundas se refieren a la parcela concreta para cada automóvil. Así, Granada registra un total de 390 zonas que aglutinan 644 plazas, lo que supone un significativo aumento del 368% en ocho años. 

La decisión que lleva a reservar una nueva plaza puede motivarse de oficio o a instancia de parte, ya sea de forma individual o colectiva. En primer lugar, el Ayuntamiento puede iniciar de motu propio el proceso para reservar nuevos estacionamientos cerca de hospitales, centros educativos u otras instituciones públicas. Por otra parte, una asociación o particular puede enviar al Consistorio una petición expresa, siempre que se constate una falta de espacio destinado a personas con movilidad reducida. 

"Si un ciudadano acredita que tiene la tarjeta de discapacitado y que no existe plaza cercana a su domicilio, el procedimiento se pone en marcha con la máxima celeridad", puntualiza la concejal de Movilidad. Así pues, los requisitos para poder solicitar nuevas plazas se basan en demostrar que se posee una tarjeta y una escasez de zonas de aparcamiento cercanas al domicilio del usuario. Igualmente cualquier asociación (normalmente las relacionadas con la defensa de derechos de los discapacitados) puede formalizar una instancia en nombre de sus miembros si considera que hay un déficit en el número de plazas. 

Sin embargo, pese a tener a su disposición casi 650 aparcamientos en la capital, las personas con movilidad reducida han de enfrentarse a un enemigo común, los infractores. Aquellos ciudadanos que hacen caso omiso de la señalización e impiden que los estacionamientos queden libres para los conductores autorizados. No obstante, las cifras vienen experimentando una evolución positiva con el descenso progresivo del número de denunciados. El año pasado Granada contabilizó unas 1.060 infracciones -un 35% menos que en 2011- mientras que en lo que va de año se han alcanzado las 478, dando muestras de un descenso gradual. 

Respecto a la distribución, la concejal de Movilidad explica que su ubicación estratégica obedece a diferentes factores. Además de las peticiones expresas y las zonas próximas a edificios públicos, su concentración se corresponde con el grado de disponibilidad para estacionar. Por tanto, aquellos barrios con una mayor dificultad para encontrar aparcamiento aglutinan mayor número de zonas reservadas. Destaca el distrito Centro con un alto porcentaje debido a una gran afluencia de coches, y el barrio del Beiro, por la concentración de hospitales. 

Las plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida están recogidas en el decreto autonómico 293/2009, que regula las normas para la accesibilidad en las infraestructuras, el urbanismo, la edificación y el transporte en Andalucía. 

En lo que respecta al porcentaje de reservas, la normativa andaluza establece que en todas las zonas de estacionamiento de vehículos de vías o espacios públicos se ubicará, como mínimo, una plaza para personas con movilidad reducida por cada cuarenta restantes.